Un año más, y gracias a la organización y al ayuntamiento de Villena, pudimos disfrutar de esta prueba que ya se está convirtiendo en un clásico en nuestra ciudad. Disfraces, risas y buen humor son las características que, junto al deporte, hacen de esta prueba algo especial.
El día pintaba mal pues hasta una hora antes del inicio de las carreras llovía en Villena. Finalmente se pudo realizar la prueba y todos pudimos disfrutar de la misma. Quizá el tiempo hizo que la participación fuese algo menor que el año anterior, pero el ambiente que se respiraba era igual de sano.
Personalmente creo que se acertó en casi todo.
- El recorrido es espectacular, pasando por calles céntricas de la localidad y al mismo tiempo subiendo al castillo que le dan un encanto inigualable. Desde arriba se puede apreciar gran parte de Villena y se ve como la carrera discurre por otras calles, algo que a mi me encanta.
- El final me pareció mejor que el de los años anteriores, es decir, entrando a recoger los obsequios al patio del festero, lo que nos permite caminar después de correr y evita las aglomeraciones en la plaza.
- Los detalles de la organización son innumerables, a pesar de ser una carrera gratuita. Empezando por los regalos a los más peques, y terminando por la bolsa con la sidra y el turrón.
En definitiva una bonita carrera que nadie se puede perder. La IV edición, en diciembre de 2010 no podéis faltar.
Os dejo un montaje de fotos de la prueba.
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